Todos los clubes deportivos necesitan estabilidad económica para poder desempeñar correctamente sus funciones. Esta estabilidad implica conseguir un equilibrio entre ingresos y gastos. Así, el principal objetivo de los directivos de un club deportivo debe ser ese: minimizar los gastos y potenciar los ingresos.
En este artículo haremos especial hincapié en la reducción de los gastos. Tan importante es conseguir dinero para el club como asegurarse de que no se está desperdiciando parte del capital. De este modo, en el trabajo administrativo diario existen dos prácticas que toda directiva debería evitar, a fin de ahorrarse gastos innecesarios que merman la economía del club.
Evitar los pagos en mano
En los clubes deportivos está muy extendida la práctica de pagos en mano. Esto puede resultar problemático para los directivos, que se encuentran con altas cantidades de dinero en efectivo que gestionar, lo que a veces supone extravíos o pérdidas que pueden causar problemas en la caja del club. Además, implica tener que apuntar manualmente quién ha realizado los pagos y llevar un registro meticuloso, por lo que es un método de pago nada recomendable.
Evitar los recibos devueltos
Los recibos devueltos son un problema frecuente para los clubes deportivos. A la hora de cobrar las cuotas, puede suceder que el pagador no tenga fondos en ese momento, o quiera darse de baja del club, por lo que decide devolver el recibo. Los costes de devolución repercuten en el club, que acaba perdiendo dinero por estas prácticas. La mejor manera de evitar los recibos devueltos es escapar de las domiciliaciones y apostar por la tarjeta de crédito como modo de pago habitual.
Estas dos prácticas no solo generan gastos a los clubes deportivos, sino que además provocan complicaciones a nivel organizativo. Así, evitarlas harán que el club no pierda dinero, y también contribuirá a una mejor organización en la oficina.
Además de las prácticas a evitar, también existen prácticas recomendables para que los clubes consigan más ingresos.
